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Rotación externa de rodilla: ejercicio de la semana

¿Os suena esta imagen?

rotacion externa de rodilla

¿Y ésta?

rotacion externa de rodilla tibia

Lo normal es que suenen demasiado…por desgracia.

Rotación externa de rodilla

Se trata de una rotación externa de rodilla, que viene definida por una rotación interna del fémur con respecto a la tibia, o una rotación externa de la tibia con respecto al fémur.

Esto puede provocar, y más aún si va acompañada de un valgo de rodilla: lesión de LCA, del tendón de aquiles y fermoropatelar (es el mayor factor que provoca una menor superficie de contacto fémur-rotula (Salsich & Perman; 2007).

Este síndrome de rotación tibiofemoral (tal y como lo define Sahrmann), puede venir dado bien por la posición ósea, o bien por desequilibrios musculares, es importante saber de cuál se trata para no estar perdiendo el tiempo.

rotacion externa de rodilla con goma

El ejercicio que presento hoy tiene el objetivo de reequilibrar la musculatura.
Y antes de realizarlo sería interesante relajar un poco la musculatura que favorece esta rotación externa de la rodilla (TFL, bíceps femoral, gemelo medial y vasto lateral).

El ejercicio es realizar una rotación interna de rodilla contra la resistencia de una goma (también lo mando mucho para casa a mis clientes contra la resistencia de una pelota pegada a la pared). Como puntos a tener en cuenta hay que observar que la cadera no se desplaza lateralmente, y que el pie no supina para colaborar en el movimiento.

Me gustaría también recalcar que en la foto pongo una flecha tanto en fémur como en tibia, y en ambas provoca una rotación interna, pero como véis, la flecha del fémur es mas grande que la de la tibia, tal y como decía la definición, una rotación interna del fémur con respecto a la tibia, ambos rotan, pero el fémur más.

La semana que viene otro ejercicio bastante más avanzado para el control de la rotación externa de rodilla.

Espero que paséis una feliz semana!

Preguntas frecuentes sobre la rotación externa de rodilla

¿Qué es la rotación externa de la rodilla?

La rotación externa de la rodilla es un movimiento que ocurre cuando la tibia (la parte inferior de la pierna) gira hacia afuera en relación con el fémur (el hueso del muslo). En otras palabras, es el movimiento de girar la rodilla hacia afuera, alejándola del cuerpo.

Este tipo de rotación se produce gracias a la articulación de la rodilla, que está formada por la unión de la extremidad inferior del fémur y la parte superior de la tibia. La rotación externa de la rodilla es posible debido a la forma de las superficies articulares y a la acción de los músculos que rodean la articulación.

La rotación externa de la rodilla desempeña un papel importante en los movimientos cotidianos, como caminar, correr y realizar actividades deportivas. Por ejemplo, al realizar un giro hacia afuera al caminar, la rotación externa de la rodilla permite que el pie se mueva en dirección opuesta al cuerpo, facilitando el movimiento.

Es importante destacar que la rodilla es una articulación compleja y delicada, y el rango de movimiento de la rotación externa puede verse afectado por lesiones, condiciones médicas o limitaciones individuales. Si tienes alguna preocupación sobre el movimiento de tu rodilla o experimentas dolor o molestias, es recomendable buscar la evaluación de un profesional de la salud, como un médico o un fisioterapeuta, para obtener un diagnóstico adecuado y recibir el tratamiento adecuado.

¿Cómo se hace la rotación de rodilla?

La rotación de la rodilla se realiza mediante la acción de los músculos que rodean la articulación de la rodilla. A continuación, te mencionaré algunos ejercicios que pueden ayudarte a fortalecer y mejorar la rotación de la rodilla:

  1. Rotación externa con resistencia: Siéntate en una silla con las piernas dobladas y los pies apoyados en el suelo. Coloca una banda elástica alrededor de los tobillos y cruza las piernas, de manera que la pierna a trabajar esté por encima. Luego, realiza una rotación externa de la rodilla levantando el pie hacia afuera contra la resistencia de la banda. Mantén la posición durante unos segundos y luego regresa a la posición inicial. Realiza varias repeticiones.
  2. Rotación interna con resistencia: Realiza el mismo ejercicio anterior, pero esta vez realiza una rotación interna de la rodilla, llevando el pie hacia adentro contra la resistencia de la banda.
  3. Rotación de rodilla en posición supina: Acuéstate boca arriba en una colchoneta. Dobla la rodilla y mantén el pie apoyado en el suelo. Manteniendo el pie apoyado, gira la rodilla hacia afuera y luego hacia adentro, controlando el movimiento. Realiza varias repeticiones en cada dirección.
  4. Estiramientos de los músculos de la rodilla: Realiza estiramientos suaves de los músculos que rodean la rodilla, como los músculos de la parte interna y externa del muslo. Puedes hacerlo sentado en el suelo o de pie, y mantén cada estiramiento durante 15-30 segundos.

Recuerda que antes de realizar cualquier ejercicio es importante calentar adecuadamente y consultar con un profesional de la salud, como un fisioterapeuta, para asegurarte de que los ejercicios sean apropiados para tu condición y recibir instrucciones adecuadas. Si experimentas dolor o molestias durante los ejercicios, detente y busca orientación médica

¿Qué ligamentos permiten la rotación de la rodilla?

La rotación de la rodilla no se produce principalmente a través de los ligamentos, sino más bien mediante la acción de los músculos que rodean la articulación. Los ligamentos de la rodilla tienen principalmente la función de brindar estabilidad y limitar el exceso de movimiento en la articulación. Aunque no son los principales responsables de la rotación de la rodilla, los ligamentos también pueden tener un papel en la estabilización de la articulación durante los movimientos de rotación.

Los principales ligamentos de la rodilla son:

  1. Ligamento cruzado anterior (LCA): El LCA evita que la tibia se desplace hacia adelante en relación con el fémur. Aunque su función principal no es la rotación, ayuda a estabilizar la articulación de la rodilla durante los movimientos rotatorios.
  2. Ligamento cruzado posterior (LCP): El LCP evita que la tibia se desplace hacia atrás en relación con el fémur. Al igual que el LCA, su función principal no es la rotación, pero contribuye a la estabilidad general de la rodilla.
  3. Ligamentos colaterales: La rodilla tiene dos ligamentos colaterales, el ligamento colateral medial (LCM) y el ligamento colateral lateral (LCL). Estos ligamentos brindan estabilidad lateral a la rodilla y ayudan a prevenir movimientos excesivos hacia los lados. Aunque su función principal no es la rotación, también pueden influir en el control rotacional de la articulación.

Es importante destacar que la rotación de la rodilla es un movimiento complejo que involucra la acción coordinada de varios músculos y estructuras articulares. Si tienes alguna preocupación sobre la rotación de tu rodilla o experimentas dolor o inestabilidad, te recomiendo buscar la evaluación de un profesional de la salud, como un médico o un fisioterapeuta, para obtener un diagnóstico adecuado y recibir recomendaciones específicas para tu situación.

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