LOGO FIDIAS NARANJA Y NEGRO 2021

FIDIAS LAB

Bases de un Movimiento Perfecto

   Lo primero, me gustaría presentarme para que sepáis un poco de mí y entendáis el por qué de la línea de mis posts. Mi nombre es Fernando Morales, Ldo. en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte por la Universidad Pablo de Olavide. Tras acabar la carrera, cursé el Movement Trainner Course impartido por algunos de mis compañeros de trabajo y por otros grandes profesionales del sector, y fue ahí donde me di cuenta de que los conocimientos que me habían dado en la carrera estaban bien, pero eran solo los cimientos sobre los que a partir de ahora tendría que construir mí forma de entender la actividad física.

   Hace casi un año comencé a trabajar en FIDIAS Health & Sport Center, donde he aprendido cada día, con cada cliente, y gracias a la ayuda del fantástico equipo que formamos los entrenadores, fisios, psicólogos y nutricionista. De cada uno hay algo que aprender, y a cada uno le agradezco lo que soy ahora.

   Dicho esto voy a comenzar a hablar de lo que para mí es el punto de partida, los conocimientos básicos sin los cuales no podría explicar ninguna de las siguientes entradas que voy a hacer. Estas van a seguir la mismas líneas en que trabajo, que son la recuperación de lesiones, o cómo entrenar para no llegar a tenerlas. Así pues, os hablo de lo que para mi son las bases de un movimiento perfecto.

   Siempre que hablamos de movimiento pensamos en todos esos músculos contrayéndose o estirándose, en esos huesos soportando cargas, o, incluso, en las estructuras pasivas que estabilizan o amortiguan. Pero, ¿y quién da la orden para que toda esa función comience?, ¿quién es ese gran olvidado?, ¿el director de esa orquesta? El cerebro.

   Para mí, el cerebro es uno de los elementos más importantes, por no decir el más, en la creación de un movimiento perfecto.
Para que me entendáis, lo primero que debemos hacer al analizar una función alterada es que distingamos si el problema es de la estructura misma, o como consecuencia de una alteración del movimiento. Os pongo un ejemplo práctico que me ayude a explicarme: si pierdes jugando a la videoconsola, ¿cuál sería el motivo?: que no mandas las señales correctas (función), o que el mando (estructura) tiene la culpa. Te pueden dar mil mandos distintos que conseguirás los mismos resultados; sin embargo, si mejoras tu juego, mejorarás tus resultados con el mismo mando.
Por lo tanto, obviamente, los músculos son elementos importantísimos y habrá que trabajarlos, pero el director de la orquesta lo es, desde mi punto de vista, más aún.

Si quiero llegar al movimiento perfecto puedo hacerlo mejorando la estructura. Por ejemplo: realizando ejercicios analíticos que nos permitan mejorar la fuerza de los rotadores externos, para luego a través del desarrollo de la coordinación de ese músculo mejorado con sus compañeros de viaje (y eso es cosa del cerebro), mejorar la estabilidad del hombro en su posición correcta. Otra opción será cambiando la función, el movimiento, las órdenes que manda mi cerebro para provocar un movimiento correcto con una buena posición de ese hombro. Con este enfoque, estoy seguro de que esos manguitos rotadores externos no solo estarán fuertes, si no que además serán inteligentes, ya que sabrán cuál es su función en un movimiento real.

 Además, la señal del Sistema Nervioso (SN) se puede modificar de forma rápida, y permanente. Rápida porque sólo tenemos que encontrar las órdenes que el SN debe dar para que el movimiento sea correcto. Y permanente porque si este movimiento correcto lo realizamos muchas veces y en diferentes situaciones, acabará siendo un patrón de movimiento afianzado, y el anterior, el erróneo, lo dejará como secundario. Por lo que te ahorras tiempo y te aseguras de que esa función, como montar en bici, no se olvida.

   Una vez le hemos dado la batuta al cerebro, hablemos de los músicos.
Los movimientos son un trabajo en equipo, en el cuál cada uno tiene su función y debe actuar de forma sincronizada con sus compañeros.
Una mala distribución de la función que realiza cada uno va a provocar que unos tengan que hacer más trabajo y otros menos, por lo que ni el movimiento será perfecto ni podría asegurar que esos músicos sobrecargados no terminen lesionándose.

   Distinguiría esos músicos en dos grupos, aunque el primero va a depender del segundo (y el segundo, por supuesto, del cerebro!).

  1. Articulaciones.esqueleto bailando
    Cada movimiento ocurre en diferentes articulaciones de forma simultánea y/o consecutiva, la falta de movilidad en una puede provocar que una articulación vecina tenga un exceso de movilidad. Autores como Cook & Boyle “Joint by Joint”, Sahrmann “direccional susceptibility to movement”, Janda “Síndrome cruzado superior e inferior”, Mc Gill “Spinal hinge”…etc…aportan diferentes teorías con este denominador común.
  2. Músculos.Éstos también deben trabajar en equipo y de forma coordinada, y aquí el timing cobra gran importancia ya que hay músculos que se deben activar primero, para estabilizar, y otros después, para movilizar, ya que si no fuera así, sería como lanzar un cañonazo desde una canoa.
    El concepto timing nos habla de activación, pero también de desactivación, que normalmente es en lo que más fallamos y una de las causas por las que más nos lesionamos. Por ejemplo, el caso de los trabajadores o estudiantes a los que les duele el cuello, y usualmente ocurre por tener permanentemente activo el trapecio. Ese exceso de tensión o tensión parásita es lo que hace que nuestro movimiento no sea perfecto, ya que es como si estuviéramos tocando el piano pero siempre hubiera una nota sonando, por lo que por muy bien que suenen las demás, esa nota lo estropea todo.Hay que aprender a desactivar. Y debemos hacerlo con movimientos lentos, y el menor ruido posible (desde música o luz del sol, hasta que sea un movimiento complejo que provoque la pérdida de atención a esa no activación muscular). El movimiento debe ser lento, ya que nuestro SN debe encontrar unas nuevas señales que enviar, un nuevo camino que recorrer.
    Imaginaos que entráis en una casa por primera vez, con los ojos tapados, para ir descubriendo su distribución caminaríais lento y estando muy atentos a todo.

    Cuantas más veces caminéis por la casa la iréis conociendo más y más, hasta que os sea muy familiar y podáis comenzar a pasear por ella a más velocidad. Eso mismo ocurre con un movimiento alterado por la sobre-activación de un músculo. Hay que descubrir la forma de realizarlo correctamente, sin prisas, y cuanto más se realice, más rápido vamos a poder hacerlo sin que se modifique. Si directamente lo hiciéramos rápido, nuestro cerebro mandará las señales que más controla, con las que más cómodo se encuentra, las del movimiento alterado.

   En esta entrada he querido transmitir la importancia del SN y el trabajo en equipo de músculos y articulaciones, y a partir de aquí pretendo construir una línea en la que abordar muchas lesiones, o al menos las más comunes por las que acuden a nuestro centro.

   Agradeceros a todos la lectura, vuestros comentarios serán bienvenidos ya sea porque os ha gustado, o para tener un debate constructivo en el que aquí, todos crezcamos.

Cursos destacados

4 Comentarios

  • Dorell Riveros Restrepo
    Responder Web Designer

    Fantástico Fernando!!Me parece una idea genial,que todos agradeceremos!

  • ceferino
    Responder Web Designer

    Magnífica aportación, interesante. Te seguiré. Un abrazo.

    sebastian
    Responder Web Designer

    Muy bien Fernando, lo has explicado perfectamente, sigue trabajando en esta línea campeón y muchas gracias por esta aportación desde tu experiencia, un abrazo.

    Consuelo Lázaro
    Responder Web Designer

    Muy buen post, Fernando!!! Mi director de orquesta se sigue despistando a veces y los músicos hacen lo que quieren 😉 de vez en cuando, creo que os echan de menos jeje. Te seguiré por el blog hasta que pueda volver a Fidias. Un saludo a todos por allí.

Leave A Comment

El libro que cambiará tu forma de prevenir
y recuperar
lesiones de hombro

×

 

¡Hola!

Haz click abajo para hablar con nosotros

× ¿Alguna duda?