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Comportamiento motor de personas con dolor lumbar levantando cargas

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Es habitual que si alguien dice que le duele la espalda haya alguien de su entorno que le recomiende adoptar la postura “x” cuando hace “y”, relacionando su problema a un mal comportamiento motor. Y es cierto, las personas con dolor lumbar pueden presentar un comportamiento diferente a las que no tienen dolor…pero ¿qué le caracteriza?

Como siempre, no nos basaremos en nuestra opinión (ya hay muchas por ahí…) y buscaremos la respuesta en la ciencia. En este caso en una reciente revisión sistemática con la que sus autores han tratado de sacar conclusiones acerca del comportamiento motor de personas con dolor lumbar levantando cargas.

En primer lugar se investigó si la cinemática de los movimientos que realizan las personas con dolor lumbar difiere de la de las personas asintomáticas. Y, efectivamente, así es. Por un lado, las personas con dolor realizan los movimientos más lentos o alcanzan el pico de aceleración más tarde cuando se levanta una carga. Por otro, estas personas presentan un patrón coordinativo diferente que se caracteriza por una mayor utilización de piernas que de la espalda durante el levantamiento (ej. mayor flexión de rodilla, sentadilla más profunda, extienden primero piernas y luego mueven espalda…). En cuanto al rango de movimiento existen algunas inconsistencias en los estudios analizados, pero lo estudios más grandes que cuentan con personas con mayor grado de afectación muestran que las personas con dolor lumbar se mueven menos grados que las asintomáticas. 

Además de todo esto, también se analizaron los resultados de diversos estudios en relación a la actividad electromiográfica (magnitud, duración, timing) de los erectores espinales (ES) y otras musculaturas. 

En la revisión se incluyeron 5 estudios en los que se compararon las activaciones musculares de los ES en personas con y sin dolor de espalda; 2 de ellos no encontraron diferencias entre grupos independientemente de la magnitud y localización de la carga, el resto de estudios sí que encontraron diferencias. La primera de estas investigaciones mostró que las personas con dolor de espalda presentaban mayor activación de los ES levantando diferentes cargas y desde varias localizaciones. En la siguiente lo que se encontró fue que en las personas con dolor lumbar los ES se activaban antes y durante más tiempo. Y en la tercera, y última, que si bien los ES se activaban menos en las personas con dolor cuando dejaban la carga, no existían diferencias con respecto a las asintomáticas cuando levantaban la carga. Además, en este estudio se encontró que la actividad electromiográfica de los ES a nivel torácico era mayor en las personas con dolor, tanto en la fase de subida como de bajada. 

Con respecto a la actividad de la musculatura abdominal y el dorsal ancho, 2 estudios han mostrado que las personas con dolor de espalda presentan un mayor reclutamiento de estas musculaturas cuando realizan un levantamiento de una carga. A su vez, otro estudio ha mostrado que el dorsal derecho y el oblicuo externo se activan durante más tiempo en personas con dolor de espalda. En cuanto al timing abdominal (oblicuo interno y externo) y del dorsal ancho, los cambios observados son inconsistentes, pero o bien no se encontraron diferencias o bien el grupo con dolor conseguía una activación mas temprana. 

Estos resultados muestran que, cuando realizan un levantamiento de una carga, las personas con dolor de espalda presentan un comportamiento motor—cinemática y activación muscular—diferente a las personas que no sufren dolor. En concreto, se mueven más rígidos y lentos, flexionan más las piernas, y presentan una actividad muscular más precoz, de más intensidad y mayor duración. Asimismo, se encontró que estas diferencias se acentúan cuando las personas presentan un dolor más severo. 

Los autores del artículo plantean 3 explicaciones de por qué las personas con dolor de espalda presentan este comportamiento motor: 1) se mueven diferente para proteger la columna de una carga excesiva, 2) su movimiento forma parte del comportamiento que se produce cuando hay dolor, y 3) existe una aceptación popular de que levantar una carga con el estilo sentadilla es más seguro.  Es cierto que la naturaleza transversal de estos estudios no permiten establecer una relación causal entre los síntomas y el comportamiento motor, pero ya se ha mostrado que educar acerca de la robustez de la espalda y de que es seguro moverla y flexionarla puede facilitar un cambio de comportamiento y la reducción de los síntomas. 

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